«y llegamos a la conclusión de que el problema de Palestina, no es
sólo un problema árabe, sino que es el problema de la humanidad
entera. He ahí el porqué del llamado que lanza el Sr. Hussein TRIKI a
todos los pueblos… un apremiante llamado a la vigilancia. El frente
israelí no está en el Cercano Oriente. Está en todas partes del mundo.
y los árabes, al salvarse a sí mismos, habrían tenido el honor de
salvar a la humanidad.» Hachemi Sebai

«El sionismo no es otra cosa que la manifestación en el Medio
Oriente del carácter conquistador del imperialismo. Parece que a
la humanidad se le hubiese olvidado ya, que el capitalismo desde su
primer momento se asoció a la conquista y al despojo de territorios
enteros.» Domingo Alberto Rangel

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Hussein Triki, nació en Túnez en 1916, se comprometió muy joven en la lucha contra el colonialismo francés y fue condenado a muerte por el colon francés. Luego, a partir de 1956, una vez adquirida la independencia de Túnez, partió hacia Latinoamérica y  en 1962 fue designado representante de la Liga Árabe para América Latina, con sede en Buenos Aires.

Publicó «He Aquí Palestina», el sionismo al descubierto, en Venezuela, en francés, árabe y español en 1976, una obra radical que contiene información valiosa sobre las actividades de grupos sionistas en Argentina. ( Desvela el entrenamiento de grupos armados sionistas en el suelo de Argentina).  El libro fue reeditado en 2010, con un prefacio de Adrián Salbuchi que ven en la portada , y un capítulo adicional, en particular sobre la atroz impostura que constituye la narrativa oficial sobre el tema del «Holocausto», matriz de atroces imposturas posteriores, como la Narrativa oficial de los atentados del 11 de septiembre.

Su lucha intransigente por Palestina le valió un intento de asesinato y un torrente de artículos en contra sun persona clasificándolo de «nazista» de extrema derecha » y otras mentiras , siendo considerado por los sionistas locales y el Mossad entre las tres personalidades más peligrosas para su causa en la década de 1970. Hussein Triki también tuvo influencia en Brasil, donde permaneció entre 1978 y 1998.

En 2011, en un notable estado de salud y con una lucidez perfecta, rara a los 95 años, regresó a Túnez para participar en la revolución. Su muerte, en un accidente de tránsito en Buenos Aires, es interpretada por los rumores locales como un atentado.

El regalo a nuestra familia este libro dedicado publicado en Caracas en 1976.

Aquí publicamos la Prefacio del libro :

«La opinion pública cree, equivocadamente, que el problema palestino es un problema árabe-judío originado en una lucha política religiosa que enfrenta a los judíos, por una parte, y a los árabes – musulmanes y cristianos- por la otra.

Algunos se imaginan que se trata del simple problema de un territorio que había pertenecido a los Judíos en los tiempos más remotos de la historia y que han vuelto a ocupar en nombre de pretendidos «derechos históricos adquiridos» y en virtud de una pretendida – «promesa divina» para fundar allí, por su propia cuenta, un Estado donde los israelitas encontrarían un refugio y un puerto de paz en que estarían a salvo de las innobles persecuciones que les habían infligido los pueblos y los soberanos de Europa en el curso de todas las épocas de su agitada historia.

La opinión pública, en su generalidad, ha aprobado esta solución dada al «problema judío», que había mantenido durante demasiado largo tiempo un grave malestar entre los pueblos y una lancinante preocupación entre los políticos y dirigentes de Europa y América.

Tanto Europa como América respiraron, por fin, persuadidas – erróneamente- de que esta solución las había desembarazado para
siempre de este «problema». Bendijeron la creación del Estado de Israel y lo rodearon de toda clase de atenciones y de apoyos. Le prestaron todas las formas de asistencia y le suministraron todos los medios de matanza y destrucción, dándole así las posibilidades de perpetrar agresiones, asegurar su expansión y proceder impunemente a todas las provocaciones.

Y todo esto ocurre en esta segunda mitad del siglo veinte, en que la conciencia y el espíritu humanos han alcanzado un grado de madurez radicalmente incompatible con las discriminaciones raciales y religiosas, y un nivel de conocimientos que ha suprimido las distancias, cualesquiera sean, y dado a los hombres conciencia de una. especie de solidaridad universal y de la obligación de ayudarse mutuamente para asegurar la felicidad de la humanidad.

A este nivel de la historia de la humanidad, de la cual árabes y judíos constituyen una parte considerable, tenemos el derecho de
plantearnos esta pregunta: ¿Es cierto que el problema palestino, tal como se presenta en su profunda realidad, no es más que un simple problema árabe-judío que opone a los árabes y a los judíos que residen en Israel en un enfrentamiento que les concierne exclusivamente, y sin riesgo de comprometer solamente los intereses y el futuro de las generaciones árabes?

En cuanto a nosotros, creemos que el problema de Palestina jamás ha sido un problema árabe-judío, ni un conflicto que opone exclusivamente a los árabes y a los sionistas.

Tampoco es un conflicto que expone, solamente, el presente y el porvenir de los árabes a los peores peligros. El problema palestino nació, realmente, en un contexto mundial antes de manifestarse en tierra palestina.

Este problema, ha evolucionado en el marco de las maniobras, confabulaciones, intrigas y supercherías montadas desde hace más
de medio siglo por los sionistas ante los emperadores alemanes, sultanes otomanos y gobernantes europeos, y muy especialmente
ante los políticos y dirigentes de Gran Bretaña y Estados Unidos de América.

Porque, como lo afirma Nahum Goldmann, presidente del Congreso Sionista Mundial: «Si la población mundial judía no se hubiera comprometido a tomar partido por el Estado de Israel, éste no habría podido ver la luz, y, en todo caso no habría sobrevivido» . Porque «la población mundial judía» consiste en más de díéz millones de ciudadanos de los países del mundo donde han nacido, donde viven … y ejercen plenamente los derechos de ciudadanía.

Porque el «judaísmo mundial» -que prefiero llamar «sionismo internacional», mediante el juego de la interacción entre el negotiorum gestor y el dominus negotiorum y la ley de supervivencia solidaria de uno y de otro, dispone de la riqueza y del trabajo de todos los pueblos para asegurar a Israel los medios de vida, de agresión, de expansión y de provocación a expensas de su bienestar, de su felicidad y de su dignidad nacionales.

Porque en fin, sin estos cercenamientos ininterrumpidos de las riquezas nacionales y del trabajo de los pueblos, habría sido imposible la existencia y la supervivencia del Estado de Israel… habría sido imposible que el problema palestino se planteara y preocupara a la opinión mundial a lo largo de todo un cuarto de siglo, poniendo en peligro permanente la paz mundial y la seguridad de las naciones.

El Sr. H.S. Truman, ex presidente de los Estados Unidos de América (1945-1955)ha dicho: «Quien no entienda la problemática
sionista no comprenderá el mundo de nuestros días».

Por otra parte, Aba Eban, Ministro de Asuntos Extranjeros de Israel. dijo en uno de sus discursos desde la tribuna de las Naciones
Unidas: «Si no comprendemos perfectamente las circunstancias que dieron nacimiento a este problema, no estaremos jamás en condiciones de darle una justa solución».

Por otra parte, Aba Eban, Ministro de Asuntos Extranjeros de Israel dijo en uno de sus discursos desde la tribuna de las Naciones
Unidas: «Si no comprendemos perfectamente las circunstancias que dieron nacimiento a este problema, no estaremos jamás en condiciones de darle una justa solución».

En los capítulos de este libro, hemos tratado, pues, el problema palestino en su contexto mundial, confrontándolo con las realidades históricas vividas por Palestina desde su entrada en la historia. Hemos sometido, por otra parte, a la luz de los hechos, las maniobras de los sionistas, sus maquinaciones, sus complots, sus intrigas y su supercherías desde 1797 y, muy especialmente, desde 1897. Esperamos así ayudar a la opinión pública mundial a «entender la problemática sionista» para permitirle «comprender perfectamente» las realidades del mundo de nuestros días, como lo dijera el Sr. Harry S. Truman, y «comprender perfectamente las circunstancias que han dado nacimiento a este problema … y estar en condiciones de darle una justa solución», como lo pide Aba Eban .

Una solución que salvaguarde el derecho de los árabes en sus hogares. el de los judíos en sus respectivas patrias y el de todos los
pueblos en sus propios países.

Esperamos así, haber servido a la Humanidad ya la Justicia. » Túnez, Noviembre de 1971- Hussein Triki